La planta de producción de biometano de Sebigas y Maserati inyectará más de 5.000.000 m3/año de biometano en la red para transporte
Desde finales de abril está oficialmente en operación una planta de producción de biometano, alimentada con la fracción orgánica de residuos sólidos urbanos (OFMSW, por sus siglas en inglés), diseñada y construida por Sebigas para Maserati Energia (propiedad de Maserati y Sebigas), y ubicada cerca de Piacenza, Italia.
La planta, que ocupa un área de 35.000 m2, ha sido diseñada para tratar 50.000 t/año de OFMSW y 5.000 t/año de residuos vegetales. Las diferentes fases de tratamiento optimizan todo el proceso, reduciendo la producción final de residuos. De hecho, solo el 7% de los residuos recibidos (plásticos, metales y otros inertes) no se tratan.
El corazón de la planta, donde se realiza el proceso de digestión anaerobia húmeda, está compuesto por 5 tanques (1 pre-tanque, 3 digestores y 1 tanque final). El biogás producido a partir del proceso de digestión anaerobia se trata luego en el sistema de mejoramiento específico, que separa el CO2 del metano, produciendo 5.100.000 m3/año de biometano para transporte.
La planta de Maserati Energia transforma los desechos orgánicos producidos por aproximadamente 600.000 ciudadanos en un año, en más de 180.000 repostajes de metano, o lo que es lo mismo más de 54.000.000 km, o 90.000 viajes en automóvil de Roma a Milán en un año. Además, la planta permite la gestión local de los residuos recolectados, minimizando los transportes y reduciendo así el impacto ambiental de todo el proceso, generando una economía de alto valor e incentivando la economía circular y las energías renovables.
El proceso de digestión anaeróbica, además del biometano, produce también compost (10.000 t/año) y efluente líquido limpio (36.000 m3/año). El primero se usa por completo como fertilizante en la agricultura, mientras que el efluente líquido está en parte destinado a la descarga del río y en parte se utiliza dentro de las fases de tratamiento.
